Ellas –sus botas- caminan con paso ligero.
Tienen polvo del Valle de la Luna,
heridas del Machu Pichu
y frío de Estocolmo.
Las podés encontrar en un rally
o juntando algas marinas.
Ah... me olvidaba,
si ellas te dicen maloco,
agachate que vienen los indios.
Ilustración: Alejandro Barbeito
Hola .Con la publicación de BOTAS, el terceto de los anfitriones de la Cueva, actualiza un homenaje imprescindible. Felicitaciones.